Durante años, se ha intentado resolver la inseguridad en México desde la superficie, atendiendo principalmente estadísticas de denuncias y encuestas de percepción, pero sin basarse en diagnósticos integrales de la realidad. Es cierto: la gente se siente insegura, y con razón. Pero cuando se actúa solo a partir de lo visible —lo que se denuncia y lo que se percibe— sin escarbar en las causas de fondo, las soluciones se vuelven cosméticas y los resultados, efímeros.
Hoy vemos cómo las estrategias de seguridad —muchas veces bien intencionadas— se basan en ocurrencias, modas o “recetas estándar” que no consideran lo que realmente sucede en cada colonia, municipio o estado. Y es ahí donde radica el verdadero problema: sin entender lo local, no hay solución posible.
Percepción no es igual a Realidad
La percepción es importante, pero no lo es todo. Es como mirar una tormenta desde la ventana y asumir que ya se sabe cómo está el clima en todo el país. Mientras sigamos guiándonos solo por lo que se “siente” y no por lo que se “sabe”, estaremos dando palos de ciego en materia de prevención.
México necesita menos ruido y más análisis. Menos discursos y más datos. Necesitamos saber qué pasa, dónde, cómo, con quién y por qué. Solo así se pueden diseñar soluciones sostenibles.
Cada comunidad es distinta, y merece ser escuchada
No existe una receta mágica para todo el país. Lo que funciona en Querétaro puede ser un desastre en Oaxaca, y lo que tiene éxito en Monterrey puede ser irrelevante en Chiapas. Las realidades sociales, económicas y culturales varían, y es justo por eso que conocer el territorio, escuchar a la gente y leer los datos con sensibilidad se vuelve una herramienta de transformación.
Por eso nace el curso de Analistas Delictivos del programa PIENSE
Una invitación para ciudadanos, profesionales, académicos, empresas y autoridades que quieren ir más allá de la percepción y empezar a construir paz desde el conocimiento.
Te enseñaremos a leer cifras, interpretar tendencias, conocer tu entorno y proponer soluciones preventivas basadas en evidencia y adaptadas a tu realidad.
Porque…
Lo que no se puede medir no se puede comprender.
Y lo que no se puede comprender, simple y sencillamente no se puede resolver.
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