La criminología, que tradicionalmente se ha centrado en el estudio del comportamiento criminal en el contexto de la delincuencia y el sistema de justicia penal, ha encontrado nuevas aplicaciones en la vida corporativa como respuesta a los desafíos y cambios en el entorno empresarial y de seguridad.
En ese sentido, los criminólogos han asumido un rol importante con el fin de integrar las teorías explicativas del comportamiento antisocial y delictivo, con el riesgo y la administración de la seguridad corporativa, así como el aseguramiento de la continuidad del negocio, detección de amenazas, mitigación de daños y prevención de pérdidas.
A diferencia de los especialistas con conocimientos mayormente técnicos, los criminólogos corporativos tienen influencia en todos los aspectos de la administración y toma de decisiones, elaboración de políticas, estrategias y acciones de seguridad, por su capacidad de análisis de contexto -interno y externo-, así como de la dinámica de los riesgos empresariales.
Algunos de los roles emergentes de la criminología en este ámbito incluyen:
1. Prevención de delitos corporativos: la criminología puede aplicarse para estudiar y comprender los factores que conducen a delitos dentro de las organizaciones. Esto puede ayudar a implementar medidas de prevención y políticas adecuadas para reducir el riesgo de fraude, corrupción, robo de datos y otros delitos corporativos.
2. Administración de riesgos: la criminología puede proporcionar un enfoque para evaluar y mitigar los riesgos de seguridad interna y externa en las empresas. Mediante el análisis de patrones delictivos y tendencias, las organizaciones pueden identificar áreas vulnerables y tomar medidas para fortalecer su seguridad.
3. Investigaciones internas: los criminólogos pueden contribuir en investigaciones internas dentro de las empresas para resolver casos de delitos corporativos y conflictos internos. Su experiencia en el análisis del comportamiento humano puede ayudar a descubrir pruebas y obtener una comprensión más profunda de las situaciones.
4. Ciberseguridad: con el aumento de los delitos cibernéticos, la criminología se ha convertido en un aliado importante para comprender los motivos y las tácticas detrás de los ataques cibernéticos. Esto permite desarrollar estrategias más efectivas para proteger los datos corporativos y la información sensible.
5. Evaluación de políticas corporativas: la criminología, además, puede utilizarse para evaluar la eficacia de las políticas de seguridad y cumplimiento en las empresas. Al examinar los resultados y las consecuencias de las políticas existentes, se pueden proponer mejoras para garantizar un ambiente más seguro y ético.
Es importante tener en cuenta que, debido a la naturaleza cambiante del ámbito corporativo y de seguridad, el rol de la criminología puede seguir evolucionando y adaptándose a nuevos desafíos.
Para adentrarte en este tema y conocer todo lo que la criminología y los nuevos criminólogos están haciendo por la seguridad corporativa, te recomendamos la lectura del documento La nueva era de la criminología, publicado por Mirna Zárate Hernández en la Revista Mexicana de Ciencias Penales del Inacipe.