Nota del editor: esta es la tercera entrega, de un total de 7, enfocada a la capacitación para una prevención social de la violencia y la delincuencia. Al final de cada mensaje aparecen links a las ediciones disponibles para facilitar su seguimiento.
Los actos de violencia familiar, es decir, aquellos que ocurren entre personas con lazos de consanguineidad o que comparten o han compartido lazos afectivos, así como la violencia juvenil, entendida como el uso intencional de fuerza o poder físico, amenaza o real, ejercida por o en contra de niños, adolescentes y adultos jóvenes, constituyen los dos tipos de violencia más frecuentes que ocurren en la sociedad actual.
A nivel mundial es un problema de grandes proporciones, se estima que , según datos de Unicef, más de 275 millones de niños son testigos de violencia familiar anualmente. 1 de cada 5 niños menores de 15 años son víctimas de abuso sexual, por lo general, por parte de un hombre de su familia. En América Latina, más de 40 millones de menores a 15 años sufren abuso severo y más de 80 mil mueren a causa de violencia familiar.
El castigo físico se practica habitualmente como forma de crianza y disciplina en todos los países. En México, en más del 80% de los casos de maltrato infantil, los agresores son los mismos padres y madres de los menores.
La violencia familiar consume entre el 1.6 y 2% del PIB de los países con casos de violencia contra las mujeres. 1 de cada 5 faltas de las mujeres al trabajo, se debe a este tipo de violencia.
La violencia familiar y juvenil se desarrolla en un ciclo intergeneracional ya que los niños son testigos de la violencia entre sus padres, dando origen a que aprenden a usar la violencia para resolver conflictos y problemas y, posteriormente ya siendo adultos, se involucran en relaciones violentas con sus compañeros y parejas.
Este tipo de violencia, que se manifiesta en una u otra medida en todos los niveles de la sociedad, es más frecuente de lo que se sospecha y es la más invisible, al existir una evidente ausencia de registros, de leyes y de concientización.
De ahí la importancia de conocer el contexto y los factores de riesgo y protección que, a nivel individual, familiar, comunitario y social, existen a fin de efectuar las intervenciones pertinentes con el objetivo de prevenir la reproducción de la violencia, la delincuencia juvenil y criminalidad adulta, amén de los traumas y problemas psicológicos que produce, así como las muertes que provoca.
En esta tercera de siete entregas, en el Módulo 2. Violencia familiar y violencia juvenil, podrás conocer las definiciones de estos conceptos, su magnitud, los factores de riesgo y protección, así como sus consecuencias y efectos, además de las estrategias de prevención.
Descarga:
Violencia familiar y violencia juvenil
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Artículos del programa contra la violencia y delincuencia:
1) Prevención social de la violencia y la delincuencia
2) El problema de la violencia
3) Violencia familiar y violencia juvenil