Los seguros antisecuestros son una forma de seguro diseñada principalmente para proteger a las personas y a las empresas de los riesgos y costos asociados con el secuestro. Sus pólizas generalmente cubren los gastos relacionados con la negociación, el rescate y la recuperación en caso de un secuestro.
Este tipo de seguros, asimismo, ofrecen coberturas para extorsión cibernética, de productos, retención ilícita, amenazas, desaparición, crisis de rehenes, agresión y violencia en el lugar, interrupción de negocio y gastos de retirada de productos, entre otros.
Funcionan de la siguiente manera: una persona o empresa adquiere una póliza de seguro y paga una prima anual. En caso de que la persona o empresa sea secuestrada, el seguro proporcionará un equipo de negociación y rescate, así como asesoría legal y psicológica.
Dependiendo del plan específico, el seguro puede cubrir los costos de la negociación y el rescate, así como los gastos adicionales como el transporte, la seguridad y la atención médica.
El costo de estos seguros puede variar ampliamente según la cobertura deseada y el nivel de riesgo percibido. Los costos pueden oscilar entre miles a decenas de miles de dólares por año. Las compañías de seguros generalmente evalúan el riesgo de secuestro basándose en la ubicación, el perfil de la persona o empresa y la historia de la región.
Es importante mencionar que las aseguradoras pagan por reembolso, es decir, que el asegurado en primera instancia debe pagar con sus propios medios el rescate -desde luego, con la supervisión y asesoría de los expertos designados por la aseguradora- y, posteriormente, solicitar a la aseguradora su reembolso.
Si deseas abundar y conocer al respecto, es muy recomendable que consultes con distintas compañías de seguros y compares sus planes y precios, además de informarte bien sobre las condiciones y requisitos que deben cumplirse para contratar este tipo de seguro.
Es importante que busques asesoría legal especializada y consideres la opinión de expertos -certificados- en seguridad, antes de tomar una decisión.
Aunque estos seguros pueden proporcionar una protección financiera, la mejor manera de evitar un secuestro es a través de medidas de prevención, seguridad personal y familiar, así como el establecimiento de protocolos de seguridad y vigilancia constante.
Recuerda que la información y educación, constituyen tu mejor escudo para la prevención.